El viaje que lo cambió todo 

Fue en una feria de turismo hace unos años cuando pasamos por el stand de Escocia y una chica de una agencia nos sedujo con un viaje por las Tierras Altas. Hacía tiempo que veníamos pensando en volver a Escocia ya que tanto mi pareja como yo trabajamos y estudiamos inglés un tiempo en ese país. Pero en esta ocasión queríamos hacer un viaje juntos por la zona norte que no conocíamos muy bien.

Pero fue lo que nos propuso la chica de la agencia lo que cambió nuestra forma de viajar para siempre: ¿por qué no hacer el viaje en autocaravana? A eso se dedicaba la agencia y aunque al principio nos pareció algo poco adaptado a nuestro estilo cuando lo valoramos más a fondo empezó a picarnos el gusanillo. Quizás era exactamente lo que necesitábamos, un viaje los dos solos en un entorno de belleza deslumbrante.

Finalmente aceptamos y nos lanzamos a hacer ese viaje y nos gustó tanto que nada más volver buscamos venta autocaravanas ocasion. Sabíamos que no tardaríamos en repetir, pero como no estábamos seguros de si sería algo a largo plazo pensamos que lo más razonable era buscar primero un vehículo barato que no supusiera una inversión desmesurada. Sería también una buena forma de probarnos. Porque a menudo sucede que la primera experiencia con algo es positiva por lo que la segunda siempre parte con desventaja: el listón está demasiado alto.

Y efectivamente, nuestro segundo viaje en autocaravana fue un baño de realidad. Nos enseñó la parte menos agradable de esta forma de viajar, un “lado oscuro” que todo viajero termina conociendo y que es imprescindible para saber si realmente estás preparado o no para el reto. Por eso para nosotros este segundo viaje, tras pasar por la venta de autocaravanas ocasión, fue casi más importante que el primero. Fue el que nos confirmó que, aún con la parte menos confortable de esta forma de viajar, era lo que queríamos para el futuro. Y a partir de entonces es raro que nos planteemos un viaje sin nuestra querida autocaravana.